Cómo crear un buen personaje

De acuerdo, todos sabemos que las fórmulas mágicas no existen, que lo que le funcionó a escritor x no necesariamente le funcionará a escritor y, pero la experiencia crea sabiduría, y la mía es la que intento plasmar aquí.

Tras haber leído muchos blogs y algunos libros, puedo decir que, para crear un buen personaje, se deben respetar ciertos principios:

Debes tratarlo como si fuera real

¿A quién le gusta leer sobre alguien con características inverosímiles? Alguien... demasiado listo, demasiado atrevido, demasiado heroico. Mención aparte son las parodias o sátiras, en las que los personajes serán caricaturescos adrede, pero generalmente no es el caso. Como escritores, queremos que los lectores vivan las aventuras de nuestros personajes, ¿y qué mejor si nos lo imaginamos junto a nosotros, como si fuera una persona más, llena de virtudes, pero también de defectos?

En la literatura, encontrarás conceptos como personajes planos o personajes redondos. Hallarás, incluso, teorías y guías para crear personajes, la tríada de la personalidad, entre otros. Pero déjame decirte, todo se reduce a eso: tratarlos como personas reales. Si tienes una gran imaginación, como yo, no te debe ser difícil, y si no, no te preocupes, que eso se puede entrenar. Podrías comenzar con el héroe de tu libro favorito; imaginemos, Phileas Fogg de La vuelta al mundo en 80 días. Él era bastante serio y elegante, recordarás, y te gustaría crear a alguien así, pero no tan reservado. Tal vez, con algún trauma en la niñez, un padre muy rígido que lo volvió serio, pero en el fondo quiere ser más abierto, quiere cambiar de carrera, imaginas, pero ha sido serio tanto tiempo que todos lo ven así. ¿Le importa lo que los demás piensen de él? No mucho, pero sí le importa lo que piense su familia... Y así, vas creando a tu personaje.

Hazlo distinguible

En tu libro, tu protagonista tiene el cabello negro, la piel oscura y es delgado, como otros cinco personajes más de tu historia. Si tu intención es crear un personaje terciario o hasta secundario, está bien, pero para tu personaje principal, necesitas hacer hincapié en la originalidad.

¿Cómo recuerdan todos a Harry Potter? Por su cicatriz... ¿Cómo recuerdan a Gandalf? Por su larga barba y su sombrero...

Quiérelo... aunque sea un poquito

Ok, tienes tu personaje único y con características realistas, pero realmente no te agrada como quedó, y te da igual lo que le "pase" en el libro. Más allá de tener tu trama planificada, que dice que tu protagonista debe regresar de su viaje y ver lo que le sucedió a su familia, no te importa y escribes sin alma, por cumplir, porque así debe ser y ya. Y no hay nada más equivocado. Los personajes que desarrolles en tu historia deberían al menos agradarte un poquito, con tal de que escribas con ganas sus escenas (y créeme, de verdad se nota). En este punto, no importa si un personaje es bueno o se alinea con tus valores o no, solo que te sea interesante.

Si tu personaje no te agrada para nada, considera cambiarlo para que sí. Principalmente porque es tu libro, y deberías disfrutar escribiéndolo, incluso más que leyéndolo.

¿Consideras que hay otro punto a tener en cuenta?